Chicos imperfectos. Estornudando injusticias. vomitando errores. Convulsionando perdones que nunca se pidieron. Ahora se consumen. Afiebrados de temor, temor a perderse, afiebrados de muerte y anémicos de una pasión que no se entregaron jamás. jamás la tendrán. Sedientos de ternura, de magia, de tardes de cielo anarajando y de césped envuelto en hojas crujentes. de nieve veraniega, y océanos atormentados. lluvia celestial y sonrisas eternas. ¡Cómo olvidar!, esas canciones hechas para ellos, nubes con mil formas, vientos danzantes y algunos films clásicos. Cómo se inyectan rabia, resentimientos erróneos, mal entendidos. no intentan entenderse, ¿Por qué no hacen nada por mirarse? Dueños de las estrellas, ¡oh! ¡cómo suspiran!, suspiran porque les llegó la hora. Agonizan lentamente, agonizan de amor. están matando al amor. Amor perfecto de chicos imperfectos, mejor dicho: estúpidos.
domingo, 2 de diciembre de 2007
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